Los planes y estrategias de Satanás

En nuestras meditaciones diarias de los últimos días, hemos estado examinando el mundo invisible y sus habitantes en ese plano espiritual. El apóstol Pablo escribió que en ese reino hay al menos cuatro categorías diferentes de seres espirituales que están en guerra contra la creación y el reino de Dios.

¹⁰Por último, fortaleceos en el Señor y en su poderoso poder. ¹¹Revestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis resistir las estratagemas del diablo. ¹²Porque nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino contra los gobernantes, contra las autoridades, contra los poderes de este mundo oscuro y contra las fuerzas espirituales del mal en los lugares celestiales (Efesios 6:10-12; énfasis añadido).

Cuando el apóstol Pablo describió la lucha del creyente contra las fuerzas espirituales del mal en los lugares celestiales, enumeró cuatro categorías. Antes de explicar quiénes son estos seres malignos, nos exhorta a mantenernos firmes contra las artimañas o métodos del diablo (v. 11). Consideremos esas estrategias. Utilizando la analogía de un entrenador de fútbol americano con un libro de jugadas que guía a su equipo, Satanás prueba constantemente diferentes jugadas contra cada uno de nosotros que estamos en Cristo. No debemos llamarlas «jugadas»; son estrategias diseñadas para vencer y destruir tu vida y tu testimonio de Cristo. Él observa tus debilidades y planea cómo abrumarte encontrando una falla o una inclinación en tu carácter, similar a un león que merodea: «Manténganse alertas y sobrios. Su enemigo, el diablo, ronda como león rugiente buscando a quien devorar» (1 Pedro 5:8). Te daré un ejemplo:

Hay una fábula que cuenta que los agentes de Satanás fracasaron en sus diversos intentos de llevar al pecado a un hombre santo que vivía como ermitaño en el desierto del norte de África. Todos sus esfuerzos fracasaron, por lo que Satanás se involucró personalmente en el caso, enfadado por la incompetencia de sus subordinados. Les dijo: «Habéis fracasado porque vuestros métodos son demasiado burdos para alguien como él. Observen esto». Se acercó al hombre santo con mucho cuidado y le susurró al oído: «Tu hermano acaba de ser nombrado obispo de Alejandría». El rostro del hombre santo reveló inmediatamente que Satanás había tenido éxito: una gran mueca se formó en su boca y sus ojos se entrecerraron. «La envidia —dijo Satanás— es a menudo nuestra mejor arma contra aquellos que buscan la santidad».^[1]

No subestimes el conocimiento que Satanás, sus ángeles malvados y sus demonios han adquirido a lo largo de miles de años observando a las personas en su vida cotidiana. Él entiende cómo funciona la mente humana. Recuerda que nuestro enemigo no está limitado a los setenta años de vida terrenal; lleva haciendo esto desde el Jardín del Edén.

En el pasaje de la parte superior de la página (v. 12), el término griego traducido como «lucha» es «palē», que significa luchar o balancearse hacia adelante y hacia atrás. Sugiere dos personas enzarzadas en un combate cuerpo a cuerpo, cada una intentando diferentes movimientos para vencer a la otra. Pablo aclara que nuestra lucha no es contra sangre y carne; en otras palabras, los seres humanos no son nuestros enemigos. Cuando se presenta la oportunidad, el enemigo puede utilizar a las personas en nuestra contra, pero quienes caminan con Cristo no deben tomar represalias. Nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino contra fuerzas espirituales invisibles en los reinos celestiales. Es esencial que reconozcamos esto para poder comprenderlo. Ve la oposición tal y como es en realidad. La VERDADERA batalla es contra el enemigo de nuestras almas. El Señor te dará la estrategia para vencer el mal con el bien. Pídele a Dios que te revele su plan. El apóstol Juan escribió:

Sabemos que somos hijos de Dios, y que todo el mundo está bajo el control del maligno (1 Juan 5:19).

Creo que Juan está escribiendo que Satanás ha organizado sus fuerzas malignas de tal manera que los países, las regiones, las ciudades, los pueblos [el mundo entero] y las personas tienen todos algún grado de personalidad enemiga que intenta controlar lo que sucede dentro de su esfera de influencia. Cuando se refiere al mundo entero bajo el control de Satanás, el apóstol Juan está hablando del sistema mundial establecido por Satanás contra Dios. Los que caminan con Cristo ya no están bajo su autoridad y control (Colosenses 1:13). La única forma en que él puede influir en nosotros es a través de nuestra mente, si se lo permitimos. En nuestra meditación diaria de mañana, examinaremos más de cerca las palabras griegas que Pablo utilizó para describir las cuatro categorías del mal mencionadas en Efesios 6:12, o puedes hacer clic en el enlace de abajo para leer el estudio detallado hoy.

¿Has entregado tu vida a Cristo? ¿Qué significa ser cristiano? Los siguientes enlaces de estudio te ayudarán:

https://www.groupbiblestudy.com/spanish

Enseñanzas en video de YouTube con subtítulos en español en: https://www.youtube.com/@keiththomas7/videos

^[1] Editado por Michael Green, 1500 Illustrations for Biblical Preaching (1500 ilustraciones para la predicación bíblica), publicado en 1982 por Baker Book House, Grand Rapids, Michigan. Página 121.